Dificultad: Moderada
Desnivel: 525 m
Duración: 3h 20min
Distancia: 9 km
Aproximación en coche: Pardines
Descripción de la ruta:
La ruta comienza en la Plaça del Padró, cerca de la señal R130 (Pardines). Pasamos por lo que fue el antiguo castillo de Pardines, justo al lado de la iglesia de Sant Esteve. Ambos edificios formaban parte de las antiguas murallas que rodeaban el núcleo medieval del pueblo, lo cual se puede apreciar en el ábside románico de la iglesia, que junto con el campanario, también cumplía funciones de torre defensiva.
- Inicio: Baja por el carrer Major y sigue por el carrer de Camprodon hasta encontrar la señal R131 (Camí Ramader). Este antiguo camino desciende hacia el fondo del valle, pasando por el pequeño vecindario de Llavanera.
- Cruce del río: Cruza el río Segadell por el puente del Molí d’en Roca, donde encuentras la señal R121 (Vilaró). Dirígete hacia Sant Martí de Surroca siguiendo el camino ramader que, tras una fuerte subida, te llevará al núcleo de Puigsac, donde se encuentra la iglesia románica de Santa Magdalena.
- Continuación: Deja Santa Magdalena atrás y sigue por la pista, dejando el gran mas de Can Roca a tu izquierda. Poco después, antes de cruzar un torrente, abandona la pista para seguir el camino ramader que sube por prados y retoma la pista más arriba.
- Pla de l’Estany: Sigue por la pista hasta un cruce señalizado que indica el camino hacia el Pla de l’Estany y el Pou de Glaç. Abandona la red Itinerànnia para tomar este nuevo camino ancho que te llevará en pocos minutos al Pla de l’Estany, donde encontrarás el estany de Can Roca. Una cartellera informa sobre los valores ecológicos de estas zonas húmedas. Para visitar el pou de glaç, dirígete a la ribera opuesta del estany por senderos marcados por el ganado.
- Descenso hacia el Pla de Bardina: Al final del estany, abandona el camino que seguías y gira a la derecha, cruzando los prados hasta encontrar un camino bien trazado que lleva al Pla de Bardina, con vistas espectaculares del Puigmal y montañas vecinas.
- Retorno a la pista: Retoma las señales de la red Itinerànnia en una curva de la pista ancha que baja desde la Portella d’Ogassa. Baja por esta pista paralela al Torrent del Vilaró. Después de unos metros, abandona la pista por un camino a la izquierda que cruza el torrente. Tras una corta pero empinada subida, llegarás al Coll de Bac y poco más arriba, a las ruinas de una cabaña y una closa para el ganado.
- Descenso por la Serra de Can Dulsat: Comienza a descender por la Serra de Can Dulsat. En una zona abierta, el camino gira a la izquierda y se adentra en un bosque sombrío. La bajada es rápida y te lleva a unos planos sobre la casa de Can Dulsat, donde encontrarás una segunda cartellera con una mesa de orientación. Sigue por la cresta y baja rápidamente hasta encontrar la pista asfaltada hacia la casa de Can Dulsat.
- Regreso a Pardines: Poco más abajo, te cruzarás con la carretera del Vilaró. Si no deseas volver a Pardines por el mismo camino y tienes tiempo y energía, puedes optar por seguir la pista a la izquierda, que tras cruzar el río, sube hasta la señal R129 (Mas Ventós) y desde allí al pueblo. Sin embargo, la ruta propuesta gira a la derecha, pasando por las casas de Vilaró, y sigue un camino que desciende hacia el puente del Molí d’en Roca, donde vuelves a encontrar la señal R121. Finalmente, regresa al punto de partida en Pardines, donde comienza y termina la ruta.